El origen de Serrilla se remonta a la edad media, cuando en la ladera del monte La Cuesta, y en la orilla de río, se estableció un monasterio probablemente dedicado a San Félix, aunque no hay evidencias de ello, sino que se presupone dada la cercanía que existe con la Iglesia de San Félix, situada también a orillas del río, pero en la localidad vecina de Villalfeide.

Históricamente tanto Matallana de Torío como Serrilla han estado vinculadas, dado que siempre han estado regidas por el mismo Ayuntamiento, inicialmente el de Vegacervera, y a partir del siglo XIX Matallana constituyó su propio Ayuntamiento, pasando Serrilla a depender de éste.

Los monjes que habitaron el monasterio primigenio lo empleaban como ropería, donde se asistía a los pastores trashumantes que venían del sur con sus rebaños con ropa, pan, sal y otras necesidades. Ese es el origen del nombre de este Molino.

Las épocas de mayor esplendor de la localidad fueron durante la Mesta, y posteriormente en el siglo XIX y principios del siglo XX gracias a la actividad minera de la zona.